Fácil, rápido, sin horno, apto para todos los públicos y para cocinar con niños, riquísimo y genial, así es el dulce de la receta de hoy.
Estas delicias de coco son un homenaje a unas cocadas que me preparaba una vecina cuando era pequeña y que siempre me han encantado. Hace unos días comiendo unas pastas de coco en una pastelería de Trubia que se llama el Vasco me acordé de ellas y decidí inventarme algo parecido a los dulces de mi vecina en cuestión. Y así nace esta «receta».
Pero ¡OJO! NIVEL DE ADICCIÓN 10…Son un vicio terrible así que tendréis que sacar lo mejor de vosotros y desarrollar una enorme fuerza de voluntad. Son tan adictivos que incluso es difícil no caer en la tentación de comerse la mezcla.
Después de esta recomendación y sabiendo que sois súper comedidos y seréis fuertes, aquí os dejo esta receta tan resultona. 3…2…1…On y va!!!!
Trituramos las galletas María. Este proceso lo podemos hacer tanto a mano con la ayuda de un rodillo por ejemplo o con un robot de cocinar. Procederemos hasta que nos quede una harina gruesa de galleta.
Vertemos la leche condensada sobre la harina de galleta. Mezclamos bien hasta que quede una masa uniforme.
Añadimos 125gr de coco y empezamos a mezclar energicamente hasta que nos quede una mezcla muy uniforme de galleta, leche condensada y coco.
Cogiendo trocitos de la masa hacemos bolitas. En un plato colocaremos los 75gr restantes de coco y rebozaremos las bolitas en éste. Las colocamos en una bandeja.
Una vez hemos hecho todas las bolitas y las hemos dispuesto en una bandeja las dejaremos en el frigorífico hasta el momento de servir nuestras cocadas.
Además es ideal para un detalle muy dulce:
Compra una cajita mona o un envoltorio chulo y tu regalo encantará seguro.
¡Disfrutad cocinando!
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