¡Hola gastrónomos!
Hoy quiero compartir con vosotros el discurso de Juan Luis Garcia en la X edición de premios Salsa de Chiles. Fue una pena no poder acompañarle en este momento, por ello quiero darle la enhorabuena desde aquí. En primer lugar, quiero decir que para mi es un honor tener un amigo como JL. Juan Luis García era para mi un referente en el mundo del vino, a día de hoy además puedo presumir de compartir amistad, de que de forma altruista me asesore y explique, así como me guíe por este mundillo que él tan bien conoce. Juan Luis es una de esas personas a las que yo admiro porque sabe dignificar una profesión como pocos saben. Sus ganas de aprender día a día y su entusiasmo -ese que tan bien sabe transmitir- han hecho que Carlos Maribona, otro de mis referentes, se haya fijado en él y le haya entregado tan merecido premio: ser el mejor profesional de sala 2018. Sin más dilación, os dejo con sus palabras;
Para mí hoy es un día de agradecimientos.
En primer lugar, quería dar las gracias a SALSA DE CHILES por la nominación, y dar la enhorabuena a María José Monterrubio (Rte. Piñera), Rafael Sandoval (Rte. Coque) y David Robledo (Rte. Sant Celoni) por ser tan grandísimos profesionales.
Este premio no hubiera sido posible sin la confianza puesta en mi del ‘CHAVAL DE PRACTICAS’ … un tal Nacho Manzano, y del apoyo de sus hermanas, Sandra, Esther y Olga. Sin ellos y sin todo el equipo q hay detrás, yo no estaría aquí y desde aquí quiero decirles GRACIAS.
No podía dejar de rendir un pequeño homenaje a las dos personas sin las cuales ninguno de los antes mencionados, ni yo, estaríamos aquí. Ellos fueron los que iniciaron toda esta aventura hace más de 50 años, y que un loco, Nacho, pego un giro hace 25 años: MARCIAL MANZANO Y OLGA SANCHEZ. Marcial un día me dijo una frase … El que quiera aprender tiene que correr o leer. Una frase que me impactó y que siempre llevaré el el corazón.
También quiero darle las gracias a mi familia por aguantarme en la distancia (ellos en Murcia y el trastornado en Asturias), y apoyarme en esta profesión que requiere tanto esfuerzo, sacrificio y dedicacion.
Por supuesto, quiero dar las gracias todos y cada uno de ellos que han depositado el voto en mi y a todas aquellas personas que desde que llegué a Asturias han confiado en mi trabajo, por ver positivamente mi forma particular de esta profesión de CAMARERO, que es una de las más maravillosas del mundo.
Para terminar recordar que … LOS VIEJOS ROKEROS NUNCA MUEREN
MUCHAS GRACIAS